Menopausia y piel: qué cambios provoca y cómo cuidar tu piel en esta etapa

En esta etapa de la vida de la mujer, la piel se ve directamente afectada, con síntomas como: pérdida de elasticidad, sequedad, manchas… Te explicamos qué ocurre, por qué sucede y qué puedes hacer para prevenir y tratar estos signos.

Empecemos por lo más importante: que estés en perimenopausia o menopausia no quiere decir que sea el fin de tus días. Sin embargo, la realidad es que sí que trae cambios en el metabolismo, en el estado de ánimo… Y, sí, también a la piel.

 

De hecho, muchas mujeres, puede que tú también, comienzan a notar que su piel ya no responde igual: se vuelve más seca, pierde firmeza, aparecen manchas o arrugas más marcadas, incluso aunque antes no estuvieran.

La buena noticia es que todos estos cambios tienen explicación y, sobre todo, solución. Porque con el asesoramiento adecuado y una rutina adaptada, es posible frenar el envejecimiento prematuro y devolverle a la piel su equilibrio.

¿Qué le pasa a tu piel durante la menopausia?

Los principales responsables de los cambios en la piel durante esta etapa son los estrógenos, que disminuyen de forma drástica en esta fase. Estas hormonas son clave para mantener el buen estado de la piel porque:

  • Estimulan la producción de colágeno y elastina, las proteínas que mantienen la piel firme y elástica.

  • Favorecen la hidratación natural, al mantener una buena función barrera.

  • Regulan la pigmentación y la regeneración celular.

Con su descenso, la piel se vuelve más vulnerable y aparecen signos como:

  • Pérdida de firmeza y elasticidad: Los tejidos se vuelven más laxos, especialmente en zonas como el cuello, el contorno facial o el contorno de ojos.
  • Sequedad e irritación: La piel pierde su capacidad de retener el agua, lo que provoca tirantez, descamación e incluso sensibilidad.
  • Arrugas más marcadas: El colágeno disminuye hasta un 30% en los primeros cinco años tras la menopausia, lo que hace que las arrugas se hagan más visibles.
  • Manchas hormonales: Los desequilibrios hormonales favorecen la aparición de hiperpigmentaciones en zonas como el rostro, el escote o las manos.
  • Piel más fina o frágil: La epidermis se adelgaza, lo que hace que la piel sea más propensa a lesiones o alteraciones de textura.

Factores que agravan los cambios de la menopausia

Aunque la menopausia influye, existen factores externos que pueden acelerar o intensificar estos efectos si no se abordan a tiempo:

Exposición solar acumulada

El daño solar es acumulativo. Si no has utilizado fotoprotección de forma regular, es probable que las consecuencias se hagan más visibles durante esta etapa.

Estrés crónico y falta de descanso

El estrés eleva el cortisol, una hormona que deteriora la función barrera de la piel y favorece la inflamación crónica. Dormir mal también ralentiza la regeneración celular.

Dieta pobre en antioxidantes y agua

La piel necesita nutrientes como la vitamina C, los omega-3 o el zinc para mantenerse sana. Una alimentación pobre o desequilibrada afecta directamente a su aspecto.

Rutinas de cuidado inadecuadas o inexistentes

No utilizar productos específicos para piel madura, seguir con las mismas cremas de siempre o abusar de exfoliantes puede empeorar los síntomas cutáneos.

Cómo cuidar tu piel en esta etapa: rutina y hábitos inteligentes

Durante la menopausia, el objetivo no es solo “hidratar más”, sino adaptar la rutina a la nueva fisiología de la piel. Aquí van algunas recomendaciones prácticas:

Limpieza suave y efectiva

Evita los limpiadores agresivos o con alcohol. Opta por fórmulas respetuosas con el manto hidrolipídico y ricas en activos calmantes.

Hidratación profunda

La piel necesita agua… Pero también lípidos. Busca productos que combinen ácido hialurónico, ceramidas y aceites vegetales nutritivos.

Protección solar diaria

Aunque no tomes el sol de forma directa, la radiación UVA sigue actuando y es la principal responsable del envejecimiento prematuro. Usa fotoprotector todo el año.

Cosmética adaptada a piel madura

Apuesta por fórmulas con activos regeneradores, reafirmantes y antioxidantes: péptidos, retinol en bajas concentraciones, vitamina C, resveratrol…

¿No sabes qué productos elegir o cómo combinarlos? En Estetik+ te ayudamos con un diagnóstico facial gratuito, donde analizamos el estado de tu piel y diseñamos una rutina a medida para ti.

Tratamientos estéticos recomendados en menopausia

Además del cuidado diario en casa, existen tratamientos profesionales que potencian los resultados y ayudan a recuperar firmeza, hidratación y luminosidad. Algunos de los más indicados en esta etapa son:

Indiba facial

Indiba facial es una tecnología de radiofrecuencia que estimula la regeneración celular desde el interior. Mejora la elasticidad, redefine el óvalo facial y proporciona un efecto tensor sin cirugía.

Re-Gen

Re-Gen es un protocolo avanzado de hidratación y nutrición celular que reponen lo que la piel ha perdido con el tiempo. Son ideales para tratar sequedad, piel opaca o con pérdida de densidad.

Peeling químico suave

Ayuda a renovar la capa superficial de la piel, mejorar la textura, unificar el tono y suavizar arrugas finas sin agredir ni irritar.

Mesoterapia virtual

Tratamiento sin agujas que introduce principios activos a nivel profundo. Perfecto para pieles que necesitan un refuerzo sin procedimientos invasivos.

Todos estos tratamientos están disponibles en nuestras clínicas de Logroño y Vitoria, y pueden combinarse según tus necesidades específicas.

Menopausia y piel: el autocuidado también es bienestar emocional

Cuidar tu piel durante la menopausia no es una cuestión de vanidad, sino una forma de reconectar contigo en un momento de cambio. Es un gesto de autoestima y bienestar que influye directamente en cómo te ves y cómo te sientes.

Reserva tu diagnóstico facial gratuito en nuestra clínica de Logroño o Vitoria y empieza a cuidar tu piel con criterio, ciencia y mimo.

Deja una respuesta